La oferta gastronómica de La Palma es un reflejo de la riqueza cultural y agrícola de la región, al ofrecer una variedad de platos tradicionales que encantan a locales y visitantes. Entre las especialidades más destacadas se encuentran el sancocho de gallina, la sopa de balines, las arepas de cemento y fiambre, todos preparados con ingredientes frescos y locales. Además, los festivales gastronómicos que se celebran en el municipio brindan la oportunidad de disfrutar de platos típicos acompañados por productos frescos del campo, como frutas, verduras, y carnes de la región. La gastronomía de La Palma es una experiencia auténtica que combina sabores tradicionales con la calidez de su gente.
La Palma
Platos típicos
Bocadillo de Maíz
Envuelto en Hoja de Plátano Seco
Las Nacumas
Arepa de cemento
sopa de balines
Envueltos de maíz
Fiambre
El Guarapo
Sancocho de gallina
Bocadillo en hoja de plátano
Es una preparación tradicional de la región que se caracteriza por su sabor dulce y su elaboración artesanal. Su preparación comienza con la mezcla de harina de maíz con azúcar o panela, según el nivel de dulzor deseado y puede añadirse canela en polvo para darle un toque aromático. Luego, se incorpora agua, poco a poco, hasta obtener una masa suave y ligeramente húmeda, lo suficientemente firme para formar los bocadillos.
Las hojas de plátano secas, que serán usadas para envolver la masa, se lavan y se pasan por fuego o agua caliente para ablandarlas, lo que facilita su manejo. Posteriormente, se cortan en rectángulos adecuados para envolver los bocadillos. Con la masa ya lista, se toman pequeñas porciones y se les da forma rectangular. Cada porción se coloca sobre una hoja de plátano seca y se envuelve con cuidado, asegurando bien los extremos para que no se salga la masa durante la cocción.
Los bocadillos se cocinan al vapor o en agua caliente durante aproximadamente 45 minutos a una hora, hasta que adquieren una consistencia firme. Una vez cocidos, se retiran del agua y se dejan enfriar. Este bocadillo puede disfrutarse tanto caliente como a temperatura ambiente, y su sabor suave y dulce, combinado con el sutil aroma que le aporta la hoja de plátano, lo convierte en una auténtica delicia tradicional.
Platos típicos
Las nacumas
La nacuma es el retoño de la palma de Iraca o palmicha, planta que ha sido parte fundamental de la vida y la cultura en La Palma durante generaciones. Tiene un sabor único, que se describe como una mezcla entre champiñón y espárrago, lo que lo convierte en un ingrediente versátil en la cocina. Gracias a su perfil de sabor, la nacuma se utiliza en una variedad de preparaciones gastronómicas, desde platos salteados hasta sopas y guisos.
Además de su sabor distintivo, la nacuma destaca por su valor nutricional, pues es rica en calcio, vitamina C y antioxidantes, lo que la convierte en una opción saludable y nutritiva dentro de la dieta local. En la gastronomía palmeña se usa tanto en recetas tradicionales como en platos innovadores. Este tubérculo es una parte importante del legado culinario de La Palma, con profundas raíces en la identidad y el entorno natural del municipio.
Dentro de los platos que se preparan con la nacuma se destacan: los huevos pericos con nacuma, empanadas de nacuma y arroz con nacumas, entre otros
Platos típicos
Arepa de cemento
Para elaborarlas se muele el maíz blanco en un molino de piedra hasta obtener una harina gruesa y homogénea. Luego, esta se cierne con cuidado en un colador elaborado con palma para que quede bien fina. Una vez lista, se humedece la harina con agua y sal y se amasa con las manos hasta lograr una consistencia uniforme. Posteriormente, la masa se pasa nuevamente por un molino de granos. Con esta harina seca, se forman las arepas a mano, dándoles su forma característica y se colocan sobre hojas de plátano, donde se dejan reposar por aproximadamente una hora. Finalmente, en un fogón de leña, se cocinan, colocándolas sobre el calor por unos cinco minutos de cada lado, o hasta que adquieran un tono amarillento y estén ligeramente doradas y cuarteadas, que es su característica principal. El fogón de leña les otorga un sabor ahumado único, que es parte esencial de esta receta tradicional.
Platos típicos
Sancocho de gallina
Para preparar este plato tradicional y reconfortante hay que comenzar por cocinar la gallina en trozos en una olla grande con agua, junto con cebolla, ajo y cilantro para dar sabor. Cuando la carne está casi cocida, se agregan tubérculos como yuca y papa, además de plátano verde, todos cortados en trozos grandes. Se sazona con sal, comino y color (achiote) al gusto. La sopa se deja hervir a fuego medio hasta que todos los ingredientes estén tiernos, lo que suele tomar alrededor de una hora. Justo antes de servir, se añade mazorca de maíz cortada en rodajas y se deja cocinar por unos minutos más. El sancocho se sirve caliente.
Platos típicos
Chanfaina / Sopa de balines
Es un plato tradicional que se elabora con vísceras, menudo (estómago de res), arroz, arvejas secas y papa. Se comienza limpiando muy bien las vísceras y el menudo, asegurándose de retirar cualquier impureza. Luego, se cortan en trozos pequeños y se cocinan en agua con sal hasta que estén tiernos. Este proceso puede tomar alrededor de una hora, dependiendo de la textura.
Mientras se cocinan las vísceras, se prepara el resto de los ingredientes. Se pelan y cortan las papas en cubos medianos, y se cocinan las arvejas hasta que estén suaves. El arroz se lava y se deja listo para añadir a la sopa. Una vez las vísceras y el menudo están cocidos, se retiran del caldo y se reserva el líquido de cocción. En una olla grande, se sofríen cebolla, ajo y especias como comino y cilantro en polvo, que aportan mucho sabor. A este sofrito se le añade el caldo reservado y se incorporan las papas, las arvejas, el arroz y las vísceras cocidas.
La sopa se deja cocinar a fuego medio hasta que el arroz esté completamente cocido y las papas estén tiernas, lo que toma unos 20 a 30 minutos. Se ajusta la sazón con sal y pimienta al gusto, y, una vez lista, la sopa de chanfaina se sirve bien caliente, acompañada de cilantro fresco.
Platos típicos
Envueltos de maíz
Son elaborados con una masa suave de maíz tierno y cocidos en hojas de mazorca. Para prepararlos, primero se desgranan las mazorcas de maíz tierno y se muelen los granos hasta obtener una masa suave y homogénea. A esta masa se le agrega azúcar al gusto y una pizca de sal. Una vez lista la mezcla, se toman porciones de la masa y se colocan en hojas de mazorca, que previamente se han lavado y secado, formando pequeños paquetes alargados. Estos envueltos se aseguran doblando los extremos de las hojas hacia adentro, y se colocan en una olla con agua caliente para cocinar al vapor durante aproximadamente 45 minutos a 1 hora, hasta que la masa esté firme y bien cocida.
Al finalizar la cocción, se retiran los envueltos del agua y se dejan enfriar un poco antes de servir. Se pueden disfrutar solos, con mantequilla, o acompañados de una bebida caliente como chocolate o café.
Platos típicos
Fiambre
Es un plato ideal para transportar y disfrutar al aire libre. Se elabora envolviendo una combinación de alimentos en hojas de plátano, que aportan un sabor y aroma únicos. Para prepararlo, primero se pasan las hojas de plátano por el fuego para ablandarlas y facilitar su manejo. Luego, se cocinan los ingredientes principales: el arroz con mollejitas de pollo, las carnes (res, cerdo y pollo), papas, yuca, mazorca, plátano y ahuyama. Una vez todo está cocido, se monta sobre la hoja de plátano, comenzando con una base de arroz, seguida de las carnes, la yuca, la papa, el plátano y la ahuyama. Para darle un toque de sabor adicional, se añade una cucharada de hogao, una salsa de cebolla y tomate. Finalmente, se envuelven cuidadosamente los ingredientes en la hoja de plátano, formando un paquete bien cerrado que se amarra con una tira de la misma hoja o con un cordel. Dado que se sirve directamente en esta envoltura, es una comida práctica y deliciosa para llevar a paseos o disfrutar en festividades.
Guarapo
En La Palma la elaboración de esta bebida sigue un proceso tradicional que inicia al agregar panela o miel de caña de azúcar a un recipiente con agua, preferiblemente de barro, para conservar mejor los sabores. En el fondo del recipiente se colocan los «cunchos» o «zupias», que son levaduras naturales esenciales para el proceso de fermentación, que varía según la intensidad deseada, pero generalmente se deja reposar por tres días.
Durante la fermentación, el guarapo adquiere un carácter único, gracias al clima y las tradiciones locales. Una vez fermentado, se sirve frío y, en muchas ocasiones, se acompaña con hielo, lo que lo convierte en una bebida ideal para los días cálidos. Esta bebida es muy apreciada en La Palma por su sencillez y por ser un reflejo de la cultura campesina de la región. Forma parte de las celebraciones y encuentros comunitarios.
